jueves, 3 de septiembre de 2015



FASCITIS PLANTAR



La fascia plantar es una banda de tejido muy gruesa que cubre los huesos en la base del pie, y se extiende desde el talón (calcáneo) hasta la bola del pie.

La aponeurosis plantar tiene grandes analogías con la aponeurosis palmar de la mano. Superficialmente, la aponeurosis plantar externa esta en relación con el tejido celular subcutáneo y con la piel: numerosos tractos fibrosos, verticales o ligeramente oblicuos la unen fuertemente a la cara profunda de la dermis. Por su cara profunda cubre el abductor y el flexor corto del dedo pequeño (imágenes de los clásicos libros de Anatomía, Testut 1947, y Sobotta).

                                      


La fascia plantar actúa como una banda de caucho para crear la tensión que mantiene el arco del pie. Sin embargo, el pie plano o cavo no es una condición que dependa sólo de la tensión de la fascia plantar, sino también de ciertos ángulos mecánicos condicionados por la posición de los huesos del talón y pie.

En algunas personas, esta fascia puede inflamarse y causar dolor sobre todo a nivel del talón, haciendo que caminar sea más difícil.


Condiciones que predisponen a la fascitis plantar:
-       Pies cavos o planos.
-       Correr largas distancias, con pendientes o en superficies desiguales.
-       Obesidad
-       Tendón de Aquiles tenso.
-       Zapatos con soporte de arco deficiente o suela blanda.
Prevalencia
A menudo en hombres activos 40-70 años.
Es una de las dolencias ortopédicas más comunes del pie.
Síntomas
-       Dolor y rigidez en la parte inferior del talón.
-       El dolor normalmente empeora por la mañana al levantarse, después de pararse, al subir escaleras o después de una actividad intensa.
Prevención
-       Ejercicios de estiramiento en el tendón de Aquiles, tobillo y músculos de la pantorrilla.
-       Estirar la fascia plantar por la mañana antes de levantarse de la cama.
-       Hacer actividades con moderación.
Productos relacionados
-       Tobillera tipo Aircast Airheel
-       Férula nocturna.
-       Talonera.
-       Bolsas de gel para aplicación frío.
-       Plantillas.
-       Zapatos especiales.
-       Calcetines especiales.

Espolón y Fascitis plantar
Con frecuencia, se piensa que la fascitis plantar es causada por un espolón en el talón. Sin embargo, esto no es así. En las radiografías, se observan espolones en el talón en personas con y sin fascitis plantar. Es decir, una persona puede tener un espolón radiográficamente demostrable y no presentar fascitis y de igual forma tener fascitis sin tener espolón.
Síntomas

El síntoma más común es el dolor y la rigidez en la parte inferior del talón. El dolor puede ser sordo o agudo. La planta del pie también puede doler o presentar ardor.
El dolor puede aparecer de manera lenta con el tiempo o aparecer repentinamente después de una actividad intensa.
Pruebas y exámenes

El médico llevará a cabo un examen físico que puede mostrar:
·       Sensibilidad en la planta del pie.
·       Pies planos o arcos altos.
·       Hinchazón o enrojecimiento leve en el pie.
·       Rigidez o tensión en el arco de la parte inferior del pie.
Se pueden hacer radiografías para descartar otros problemas.
Tratamiento

El tratamiento de la fascitis plantar puede resultar difícil ya que hay varios factores que condicionan el tipo de tratamiento. La edad del paciente, el tipo de trabajo que tiene (por ejemplo, si está muchas horas de pie o no), la actividad deportiva que realiza (por ejemplo, si es corredor habitual).
El tratamiento suele recomendarse según escala de agresividad. Es decir, el médico normalmente recomienda primero estas medidas:
·         Tomar paracetamol o antiinflamatorio para reducir el dolor y la inflamación.
·         Ejercicios de estiramiento del talón y del pie.
·         Descansar, lo que se pueda, durante al menos una semana.
·         Usar calzado con buen soporte y amortiguación.
Muchas veces con estas sencillas medidas sintomáticas la condición mejora y no es necesario hacer otra cosa. Sin embargo, si el dolor persiste se puede intentar:
·         Aplicar hielo al área del dolor. Haga esto al menos dos veces por día durante 10 a 15 minutos, con mayor frecuencia en los primeros dos días.
·         Ensayar con el uso de una talonera ortopédica, almohadillas de fieltro en la zona del talón o plantillas para zapatos.
·         Usar férulas en la noche para estirar la fascia lesionada y permitirle que sane.
Si todavía estos tratamientos no funcionan, el médico puede recomendar:
·         El uso de una bota como férula, la cual se asemeja a una bota de esquí, por tres a seis semanas. Se la puede quitar para bañarse.
·         Plantillas para zapatos hechas a la medida (ortopédicas).
·         Inyecciones de esteroides o inyecciones en el talón. En muchos casos son efectivas aunque pueden ser dolorosas.
En nuestra experiencia, para iniciar la actividad deportiva, bien carrera contínua o deportes como el fútbol, baloncesto o balonmano, es aconsejable colocar una ortesis tipo Aircast Airheel. Suele resultar bastante eficaz.
Algunas veces, se necesita una cirugía del pie para aliviar el dolor. Dicha cirugía suele consistir en desinsertar parcialmente la fascia en su origen en talón.
¿Qué esperamos? Pronóstico

Los tratamientos no quirúrgicos casi siempre mejoran el dolor. El tratamiento puede durar desde varios meses hasta dos años antes de que los síntomas mejoren. Hay que recordar que los humanos caminamos en bipedestación. Un autor decía:¨ Si caminásemos con las manos, nos dolerían las manos¨. La mayoría de los pacientes se siente mejor en 9 meses.
Cuándo contactar a un profesional médico?

Consulte con el médico si tiene síntomas de fascitis plantar.
Prevención

El hecho de verificar que el tobillo, el tendón de Aquiles y los músculos de la pantorrilla estén flexibles puede ayudar a prevenir la fascitis plantar. Estire la fascia plantar en la mañana antes de levantarse de la cama.

Haga sus actividades físicas con moderación y esto le puede ayudar.